Pastelitos de Mantequilla Dorada y Almendra

Quizá conoces los pastelitos franceses de almendra llamados financiers (o friands, la versión australiana). Yo soy una gran fan y por eso se me ocurrió esta receta, que en lugar de utilizar sólo claras de huevo, utiliza el huevo entero. Lo que me encanta de esta receta es que te da una gran base con la humedad de la grasa de las almendras, que se puede utilizar para infinitas combinaciones de sabores, combinando frutas con hierbas o especias o diferentes tipos de frutos secos. En la tostadora de café en la que trabajaba en el Soho, Londres, horneábamos un nuevo sabor de friands cada día, mi creatividad tenía vía libre y fue entonces cuando me enamoré de los pastelitos de almendra.

Ingredientes:

para 10 mini pasteles

  • 140g mantequilla (más 20-30g extra)

  • 70g harina (or fécula de patata)

  • 100g almendras molidas

  • 150g azúcar glas

  • 3 huevos

  • especias/hierbas por ejemplo vainilla, tomillo, lavanda, ralladura de limón

  • fruta como moras, frambuesas, rodajas de higo o albaricoque etc.

  • azúcar glas para espolvorear

opcional:

  • 1 cucharadita de zumo de limón

  • 35g azúcar glas

Método:

Para hacer la mantequilla dorada, derrita los 150 g en un cazo a fuego medio hasta que empiece a hacer espuma. Dejar cocer unos 4-5 minutos hasta que se formen pequeñas burbujas. Cuando la mantequilla adquiera un color marrón dorado y huela a avellana, retírela del fuego y déjela enfriar durante 5 minutos. Pesar la mantequilla y añadir la cantidad que falte para llegar de nuevo a 140 g. Remover para fundir la mantequilla añadida y dejar enfriar.

Mezclar en un bol la harina, las almendras molidas, el azúcar glas y las especias o hierbas. Añadir los huevos y mezclar bien con un batidor, hasta que no queden grumos. Añadir la mantequilla (que debe estar líquida pero no caliente) y mezclar bien. Según mi experiencia, esta receta sale mejor si la dejas enfriar en la nevera durante al menos un par de horas, o incluso toda la noche. Puedes guardar la masa en un recipiente con tapa.

Calentar el horno (180ºC/160º ventilador). Engrasar moldes para magdalenas o moldes pequeños de silicona con un poco de mantequilla derretida o con spray para hornear. Verter con una cuchara la masa de bizcocho en los moldes, dejando un espacio de 1 cm hasta la parte superior. Coloca ahora la fruta que quieras añadir a los pasteles, presionando ligeramente. Hornear durante unos 25-30 minutos hasta que la parte superior de los pasteles esté dorada. Dejar enfriar durante al menos 10-15 minutos antes de desmoldarlos y dejarlos enfriar completamente sobre una rejilla.

Espolvorear con azúcar glas para servir, o mezclar azúcar glas con un poco de zumo de limón hasta obtener un glaseado espeso y rociar sobre los pasteles.